Psicología

La intervención desde el área de psicología se centra en establecer un clima de acompañamiento seguro donde poder evaluar la sintomatología que presenta el paciente, encontrando los factores que han contribuido al origen y mantenimiento de dicha patología.

Así como intervenir en la eliminación o reducción de las conductas y cogniciones, disfuncionales tanto a nivel individual como encontrando patrones en las relaciones familiares u sociales disfuncionales que fomenten la patología y sea necesario modificar para su recuperación.

Desde el área de psicología el tratamiento consiste en cuatro fases:

Evaluación

Fase inicial en el que el profesional elabora un análisis de la sintomatología y entiende los factores de origen y mantenimiento, así como si es necesario evalúa alguna patología en concreto (Trastorno de personalidad, trastorno de la conducta alimentaria, trastorno del neurodesarrollo…)

Elaboración de Plan de Tratamiento Individualizado

El profesional elabora un plan de tratamiento en el que plantear objetivos a corto y medio plazo con el paciente. En dicho plan se especificará también si es oportuno combinar las terapias individuales con sesiones grupales, o bien añadir algún otro servicio (por ejemplo, nutrición).

Intervención

Fase en la que paciente y psicólogo mantendrán sesiones individuales con la continuidad pautada en el plan de tratamiento con el fin de obtener los objetivos mencionados.

Prevención de recaídas

Fase final del tratamiento y progresión al alta. En dicha fase el psicólogo acompañará al paciente en la desvinculación de la terapia mediante un programa de prevención de recaídas.